Application fraises hélicoïdales
L'un des principaux objectifs des opérations de fraisage est de réduire la durée d'usinage. Avec des géométries d'outils spécifiques pour l'usinage de poches fermées et rondes, on parvient souvent à éliminer le processus de pré-perçage. Le fraisage hélicoïdal consiste à programmer des parcours avec des entrées hélicoïdales adaptées aux dimensions des poches.
Aperçu des outils pour les étapes d'usinage suivantes :
Ébauche
L'opération d'ébauche est responsable de la majeure partie du volume d’usinage. Des stratégies de fraisage spéciales, telles que l'usinage grande avance ou le fraisage trochoïdal, peuvent réduire la durée d'usinage et donc augmenter la rentabilité. Outre les outils à plaquettes amovibles et les fraises en carbure monobloc, des fraises hautes performances à géométrie d'ébauche spéciale sont utilisées.
Desbastado de material residual
Tras el desbastado, los usuarios mecanizarán previamente en un segundo paso de mecanizado el material residual, en concreto, las esquinas y cavidades a la cota más constante posible. Normalmente, se usan herramientas con radios en los filos o fresa de alto avance. En caso necesario, una fresa esférica podría quitar también el material residual de las esquinas.
Semiacabado
En caso de altos requisitos de precisión dimensional y calidad superficial, se recomienda un mecanizado de semiacabado antes del alisado. Con el semiacabado, el mecanizado se aproxima al perfil final del moldeado. El objetivo es mantener lo más constante posible el material residual que permita el alisado rápido muy exigente de la calidad superficial. La medida tras el desbastado será de aprox. 0,5-1 mm en el caso de los materiales templados y 0,03-0,5 mm en el de los materiales blandos. Tras el semiacabado, las medidas constantes serán 0,05-0,1 mm en el caso de los materiales templados o 0,1-0,3 mm en el de los materiales blandos.
Alisado
El mecanizado de alisado nivela la medida restante para conseguir la forma final. Tras el mecanizado de semiacabado, serán 0,05-0,1 mm en el caso de los materiales templados o 0,1-0,3 mm en el de los materiales blandos. La elección correcta serán la fresa esférica y la fresa de radio angular, en función de los perfiles finales de la pieza.